Si buscas relajarte en playas y calas de aguas cristalinas en las que olvidar el estrés y las aglomeraciones del día a día, pero además estás interesado en la historia y cultura, Tossa de Mar es tu destino ideal para perderte unos días.
Este fantástico municipio se encuentra en Gerona, Costa Brava, una de las zonas turísticas más frecuentadas de España. Sus buenas comunicaciones con otros municipios de la zona permiten que aunque no estés alojado en él, puedas encontrar un autobús con el que visitar la ciudad y todos sus encantos. Aunque te recomendamos que si tienes pensado viajar a Tossa de Mar lo hagas en tu coche particular, o alquiles uno, ya que te ofrecerá mayor libertad para poder visitar las calas paradisiacas de la zona.
Y es que uno de los principales atractivos de Tossa de Mar son sus espectaculares playas y calas. Está bañada por una sensacional costa con pequeños rincones en los que contemplar atardeceres de ensueño. Quizás, sus playas más conocidas son la Gran Playa, la principal playa del municipio, desde la que se puede apreciar la muralla de la Vila Vella, y la Playa d’es Codolar, justo al otro lado de la gran playa.
Y en el caso de que seas amante del buceo o el snorkel, Tossa de Mar también ofrece calas rocosas de aguas cristalinas en la que además de disfrutar de un maravilloso entorno, podrás practicar tu deporte preferido. En este caso, no debes dejar de visitar La Cala Bona, La Cala Giverola, o la Cala Llevadó entre otras.
Pero como os anticipábamos al inicio del post, Tossa de Mar no sólo es un destino de playa y relax, también derrocha historia y cultura, y es que se trata de una ciudad fortificada presidida por su castillo en gran estado de conservación. Por tanto, cuenta con un casco histórico, conocido como la Vila Vella de gran encanto, en el que podrás evocar la época medieval dando un agradable paseo por sus calles.
En definitiva, Tossa de Mar conjuga todo lo que un amante de los viajes puede buscar para perderse y relajarse unos días disfrutando de un paisaje único.